La facturación puede no ser algo en lo que la persona promedio piense con regularidad, pero para las empresas, en particular las que se dedican a la venta de software, es sumamente importante. Dependen de los sistemas de facturación para garantizar que los clientes paguen a tiempo y tengan una variedad de formas de pago.
El problema es que configurar estos sistemas puede consumir un tiempo de ingeniería valioso.
Álvaro Morales y Kshiitj Grover lo saben por experiencia. Programadores de profesión, trabajaron juntos en Asana, donde con frecuencia se les encomendaba implementar cambios en el empaquetado y los precios de los productos.
“A diferencia de todas las herramientas a las que teníamos acceso como desarrolladores, los sistemas de facturación eran inflexibles y rígidos”, dijo Morales. “Nos pareció muy contradictorio que las herramientas de facturación tradicionales no facilitaran la evolución de los precios con el tiempo”.
Entonces Morales y Grover hicieron lo que muchos ingenieros hacen cuando se ven obstaculizados por un software frustrante: crearon el suyo propio.
Llamado OrbeLa plataforma de facturación de Morales y Grover está diseñada para ser una “única fuente de información” para las organizaciones financieras. Orb proporciona la infraestructura para diferentes tipos de planes de facturación, como planes basados en el uso y en el consumo, así como flujos de trabajo para pagos y facturación.
“Reunimos la facturación y los datos en una única plataforma”, afirmó Morales. “Las herramientas de facturación tradicionales están muy alejadas del producto y se centran en conceptos comerciales como una ‘suscripción’ o un ‘contrato’. Orb comienza con la ingesta del uso del producto en bruto y permite a nuestros usuarios definir cualquier lógica de precios sobre esa base”.
Si bien Orb no tiene escasez de rivales en el área de facturación, el negocio va bien, me dice Morales. Los ingresos de Orb crecieron casi cinco veces en el último año, mientras que la base de clientes de la empresa se triplicó para incluir marcas como Vercel, Replit, Pinecone y Perplexity.
De hecho, Orb todavía tiene dinero en efectivo en el banco de la ronda Serie A que cerró en marzo pasado, pero Morales y Grover no podían dejar pasar la oportunidad de conseguir más.
Esta semana, Orb cerró una ronda Serie B de 25 millones de dólares liderada por Mayfield, lo que eleva el total recaudado por Orb a 44 millones de dólares con un aumento “significativo” en la valoración, dice Morales, y se utilizará para construir, entre otras funciones, un motor de recomendación de precios impulsado por IA.
“Hemos encontrado un ajuste particularmente fuerte en IA, infraestructura en la nube, tecnología financiera y herramientas de desarrollo, y hemos visto que la mayor parte de nuestro crecimiento proviene de esas verticales”, dijo Morales. Agregó que Orb planea contratar a unas 15 personas para fin de año. La startup actualmente emplea a 36, la mayoría de las cuales tienen su base en San Francisco.
Otros participantes en la ronda fueron Basecase, Greylock Partners, Menlo Ventures, Scribble Ventures, South Park Commons y Uncorrelated Ventures.